Nota:
La “Usina del Castillo” NO fue una obra del ferrocarril pero estuvo vinculada a las construcciones ferroportuarias por su vecindad y servicio; por eso la hemos incluído en el presente blog.
En 1.924 el F.C.S. adquiere las instalaciones y empresas subsidiarias del F.C.B.B.N.O. entre ellas la Usina de Loma Paraguaya, la Fábrica de Gas y los tranvías eléctricos (Tramway Bahía Blanca).
Como estas empresas no eran del interés del F.C.S., éste las pone a la venta conformando un paquete con las tres.
En el mes de noviembre de 1.929 se inícian los trabajos preliminares en Ingeniero White para la construcción de una “Super Usina” por parte de la nueva empresa eléctrica.
Estos trabajos, consistían en el relleno de la superficie afectada por la obra con el material refulado obtenido del dragado ya que los terrenos a ocupar eran bajos e inundables por el agua de mar.
La fracción de costa adquirida por Empresas Eléctricas de Bahía Blanca S. A. para la construcción de la nueva usina fue otorgada por el gobierno de la Nación , y la Dirección General de Navegación y Puertos se encargó de las tareas de relleno.
La usina en cuestión tendría un poder inicial de 15.000 KVA, aún cuando el edificio se construyó para un poder máximo de 45.000 KVA., previendo su futura ampliación.
En enero de 1.930 se habían iniciado las tareas de pilotaje en el suelo barroso, y que consistieron en el hincado de aproximadamente 700 pilotes.
Para junio de ese año una crónica de LNP del día 23, comentaba:
“Son activos los trabajos que se están llevando a cabo para la construcción de la nueva usina de Luz y Fuerza en Ingeniero White . Obra adjudicada a “Geope”,Compañía General de Obras Públicas S.A. …”
El representante técnico y administrativo de la empresa constructora era el Ingeniero Rodolfo Garnitz.
Para la fecha de la crónica se estaban construyendo los canales de refrigeración (1) habiéndose concluídos los de descarga, e iniciados los de toma de agua de mar que llegaban a los 12 mts. de profundidad.
Se habían terminado además las obras de defensa costera, conformadas por un muro de hormigón armado hacia el sur y de un talud del mismo material hacia el este.
Para fines del año mencionado más arriba, se hallaba ya levantada la estructura principal del edificio.
Durante 1.930 la empresa licitó y adjudicó la provisión de cables subterráneos, de alta tensión, para la interconexión de la nueva usina de White con la de Loma Paraguaya.
(1) El agua de mar se usaba para el enfriamiento de los condensadores donde se convierte parte del vapor utilizado en las turbinas en agua para regresarla a la caldera como agua de alimentación.
A principios de 1.931 llegan de Europa, los dos turbo generadores (fabricados por Brown Boveri) de 7.500 KVA cada uno, que formarían el primer plantel de la usina.
En realidad fue el primero y único plantel generador montado por Empresas Eléctricas de Bahía Blanca S. A.
En febrero de ese año, 1.931, se reciben las primeras dos calderas, de un total de cuatro.
También llegan parte de los materiales del tablero de comando y distribución.
Para 1.931, “salvo detalles”, el edificio de la usina en Ingeniero White, se encontraba prácticamente terminado.
Se habían instalado las cuatro calderas con sus respectivas cañerías de vapor y agua, montado los turbogeneradores y, el tablero de distribución, se encontraba en fase avanzada de instalación.
También se llevaron a cabo los montajes de los filtros de agua de refrigeración de los condensadores, para el recupero del agua de las calderas, y de dos tanques para depósito de los residuos de petróleo, de 390 m3 . de capacidad cada uno.
También en ese año se instalaron los cables subterráneos de interconexión con la usina de Loma Paraguaya.
Además, se ordenaron los materiales para instalar dos cables tripolares subterráneos (aptos para una tensión de servicio de 3 x 20000 V) a fin de transportar la energía eléctrica desde la nueva usina de Ingeniero White hasta Punta Alta, aunque provisoriamente estos cables transportaron la energía de 3 x 7000 V, que permitieron suprimir la generación de la usina local de Punta Alta (adquirida por E.E.B.B.).
El 11 de abril de 1.931 la empresa adquirió las instalaciones y la concesión Municipal de la usina eléctrica de General Acha (en ese entonces Territorio de la Pampa Central ), haciéndose cargo de las prestaciones respectivas.
El plantel de generación de la usina de Acha, era de 295 Kw.
En los primeros meses de 1.932 se iniciaron las pruebas preliminares, en la usina “Ingeniero White” (nombre con que fue bautizada la usina), obteniéndose resultados satisfactorios.
Para el 01 de octubre de 1.932 la nueva usina comenzó la generación en forma oficial.
Al iniciarse la producción de energía en White, la usina de Loma Paraguaya fue pasada a reserva, para casos de emergencia o para la prestación complementaria en momentos de carga máxima.
Por el mismo motivo la maquinaria de la usina de Punta Alta pasó a reserva, dado que los servicios de Punta Alta quedaron definitivamente alimentados con la energía generada en la nueva usina.
Tambien se extendió la asistencia hasta Arroyo Pareja.
Con la entrada en actividad de la usina de Ingeniero White, el poder instalado, en las usinas de generación, experimentó un aumento de 15.000 KVA, llegando el total a 20.750 KVA.
A mediados de 1.932, había sido inaugurado el gran elevador central del F.C.S. (de 80.000 tons), recientemente construído, cuyas instalaciones representaban un poder de 7.583 KW, alimentadas por la usina de White.
Ambas obras, elevadores de hormigón y usina son por tanto contemporáneas.
Decía una crónica del diario El Atlántico de enero de 1.932:
“Se hallan actualmente terminados los nuevos elevadores de granos que construye en Ingeniero White la empresa del F.C.S.”….
…“Junto con el majestuoso edificio de la Usina Eléctrica , que se levanta contigüo a los elevadores, forman un digno marco de progreso. Que han transformado y dado vida a terrenos que se hallaban cubierto por las aguas o formaban peligrosos cangrejales. Ambas obras, justo es confesarlo, constituyen otros tantos motivos de orgullo para nuestra ciudad y otros tantos ejemplos para los hombres de iniciativa que, por desgracia, no abundan”…
Al conectar las instalaciones graneras, con la usina mencionada, el F.C.S. desafectó la usina de su propiedad, habilitada en el año 1.908, tambien sita en White y a tiro de piedra con la anterior.
El F.C.S. poseía además otras instalaciones ferro - portuarias, como el muelle en T, muelle de los elevadores de chapa (1.908 y 1.909), muelle de alto nivel, galpón de locomotoras, estación, etc. que pasaron a ser asistidas por la usina Ingeniero White.
Carga instalada a diciembre de 1.932:
Instalación servida
Particulares en general y oficinas públicas:
Luz 14.313 Kw
FM 7.057 KW
Alumbrado público 484 Kw
Ferrocarril del Sud 20.537 Kw
Tracción (tranvía) 700 Kw
La empresa eléctrica liberó al trabajo en 1.932, cinco nuevas subestaciones de transformación estática ubicadas :
La primera, en la estación de tranvías, en calle Chile, quedando suprimida la subusina de calle Donado instalada en un local propiedad del F.C.S.
La segunda en la zona de los Cuarteles.
La tercera en calle Malvinas entre Holdich y Juan Molina,
La cuarta en el edificio de la ex usina de Punta Alta.
La quinta en el Puerto Comercial de Arroyo Pareja.
En 1.935 la empresa eléctrica con la aprobación previa de la Municipalidad extendió sus líneas de alta tensión hasta Cuatreros (hoy Cerri) para suministrar energía a los particulares al alumbrado público y al frigorífico Sansinena.
En ese mismo año entran en funcionamiento las subestaciones de: Sansinena, Cuatreros, Río Colorado y Dithurbide.
En 1.942 la empresa eléctrica vende las maquinarias y la estructura metálica de la usina de Loma Paraguaya, desafectándola del servicio, por lo que el poder de generación se reduce a 15.000 KVA, representado en la usina de generación Ingeniero White por dos grupos turboalternadores de 7.500 KVA cada uno alimentados por cuatro calderas de 615 m3 cada una.
En ese mismo año de 1.942 a efectos de usar en el plantel generación de vapor, combustibles vegetales, se adaptaron las instalaciones equipando las calderas con quemadores especiales a insuflación. La utilización de aquellos se debió a la escasez de carbón de piedra debido al conflicto de la segunda guerra mundial; dicho mineral se importaba de Inglaterra, una de las naciones beligerantes.
Con el objeto de usar dichos combustibles se instaló un plantel de manipuleo y molienda de cereales, colocándose además un desvío ferroviario, en carácter transitorio, para facilitar el acceso desde la playa del F.C.S. de los vagones que transportaban los combustibles mencionados.
…“Para el funcionamiento de los planteles de generación de la energía eléctrica se recurrió, en parte, al uso de sucedáneos vegetales, dando preferencia al trigo y a la cebada producidos en la región, a fin de responder a las recomendaciones de las autoridades nacionales y provinciales, tendientes a disminuir el consumo de combustibles nobles (fuel oil, antracita, etc.) y servir al mismo tiempo, los intereses agrícolas de la zona tributaria de Bahía Blanca”…
Carga instalada a diciembre de 1.942:
Instalación servida
Particulares en general y oficinas públicas:
Luz 21.156 Kw
FM 10.167 Kw
Alumbrado público: 509 Kw
Ferrocarril del Sud : 18.532 Kw
En el detalle de carga de 1.942 ya no aparece el ítem tracción, dado que la concesión del tranvía eléctrico fue desafectada en 1.938.
La “Usina del Castillo” estatizada durante el primer gobierno de Perón, recién fue ampliada en su capacidad generadora por los años sesenta, regenteada por D.E.B.A.
Efectivamente, fueron agregados en la nueva “Superusina” (como se dió en llamarla) 2 turbogeneradores Ansaldo, de 25 megavatios cada uno con lo que la capacidad aumentó a 65 megavatios, ya que se conservaron los dos turbogeneradores de origen.
Según las crónicas se previó en el montaje de las instalaciones y equipos complementarios una futura generación de hasta 100 megavatios.
Además en la parte externa, lado este, se realizó el montaje de tres calderas, Franco Tosi, para la provisión de vapor al grupo turbogenerador.
Las calderas estaban acondicionadas para funcionar, indistintamente, con fuel-oil o gas natural.
Unos pocos días antes de su inauguración, realizada el 10 de febrero de 1.962 por el presidente Frondizi, se realizó una red de agua desde el galpón de máquinas, en la playa del ex F.C.S., hasta la usina para garantizar la llegada de agua a las calderas, ya que en días previos se habían registrado cortes del fluído en la red que abastecía al complejo.
La cañería en cuestión tenía una longitud de 1300 mts. y el diámetro variable entre 100 mm y 75 mm .
Desafectada del servicio en el año 1.987, la usina General San Martín, nombre con el que fue bautizada oficialmente, fue posteriormente desguazada de su maquinaria en 1.997, no respetándose durante esa tarea el edificio que conserva las huellas de ese desguace (ya que se provocaron roturas innecesarias, desguace de elementos propios de la construcción, etc.), además de estar su interior contaminado con asbesto dado el poco cuidado observado en el desmantelamiento de las instalaciones protegidas con el mencionado aislante y que fue diseminado, tanto en el interior como en el exterior del edificio.
A la fecha “el castillo”, permanece cerrado por la contaminación mencionada, ya que la ansiada limpieza del mismo no a sido llevada a cabo por la Municipalidad de Bahía Blanca responsable en la actualidad de la ex – usina.
El edificio declarado Monumento Histórico Nacional (y provincial) se “conserva” en la actualidad en malas condiciones, declararlo monumento, no necesariamente implica su conservación espontánea.
Cabe mencionar que en el complejo de la ex usina, en un edificio auxiliar, ex taller de la usina, funciona el museo ferroviario “Ferrowhite” y en lo que fue la casa del gerente un café temático, bautizado con el nombre de “La Casa del Espía”.
La usina del castillo estuvo directamente ligada en sus orígenes con las obras ferroportuarias del F.C.S., a las que proveyó de energía eléctrica; en la actualidad el edificio sirve de imponente marco al museo ferroviario.
Del estilo arquitectónico de la usina del castillo.
Con respecto al título reproducimos, textualmente, una carta enviada por el arquitecto Enrique Cabré Moré al diario local, LNP en 1.983, donde brinda una explicación, con su palabra autorizada, muy detallada y concisa, del estilo arquitectónico utilizado en la construcción de la usina:
“La noble y cálida arquitectura de un castillo lombardo, sirve de albergue a la vieja usina “General San Martín”, en Ingeniero White.
Constituye un inexplicable error suponer que su estilo responde a las reglas del arte gótico o a su variedad inglesa conocida con la denominación de “Tudor”.
En ese bello edificio ningún detalle corresponde o relaciona a tan extrañas tendencias y, mucho menos, resulta cierto que el valioso grupo escultórico, dedicado a “San Giorgio”, patrono en Italia de algunas instituciones profesionales de técnicos electricistas, fuera emplazado en esa obra para complacer a supuestos magnates de la empresa británica que en aquella época usufructuaba del puerto.
Me consta que mi viejo amigo, el insigne Troiano Troiani recibió el encargo de cincelarlo para ser dedicado a una finalidad exclusivamente evocativa, de lo que probablemente ha de haber constancia en la crónicas de los diarios correspondientes a la fecha en que el edificio fue inaugurado y bendecido.
Quienes recorriendo Italia, hayan visto al Duomo, la torre y el “campanile” de Cremona, el castillo y la catedral de Ferrara, el palacio “Vecchio”, en Florencia, el castillo de “San Giorgio” de Mantua, el castillo Sforcesco de Milán, la columnata con la banda de arquerías superpuestas en la catedral de Pisa, el Palacio cívico de Siena, etc., notarán que de ésas maravillas del arte románico lombardo se sirvió el arquitecto J. Molinari cuando los directivos de “Empresas Eléctricas de Bahía Blanca” lo eligieron para proyectar la ornamentación arquitectónica del edificio para la usina que decidieron construir.
Vale la pena señalar, que al producirse a mediados del siglo pasado el estallido del antiacademicismo, que provocó la transformación del gusto artístico en varios países, también se originaron corrientes que se adhirieron al cambio adoptando un modernismo que usó de los estilos tradicionales. Generalmente tales actitudes tuvieron lugar en ámbitos regionales y así en la Lombardía se puso en boga el “neo-románico”. Sólo en esa región del norte de Italia existen innumerables “torrazza” y “campanile” semejantes a la torre que otea por encima de la Usina General San Martín, siendo exclusivo de la arquitectura románica, en la Lombardía , el arco de medio punto en las formas diseñadas por Molinari para los ventanales de la sala de máquinas y, propia de muchas de sus catedrales, la columnata y arquería de la “loggia” que se ve en lo alto de la fachada principal, sobre cuyo eje campea el “San Giorgio” del gran Troiano Troiani.
Como lo he demostrado, el edificio de la Usina Central de Electricidad General san Martín, es una valiosa expresión moderna neo -románica- lombarda, siendo parte integrante del patrimonio artístico de Bahía Blanca y al igual que el origen románico de la lengua hispánica que hablamos, expresión importante de la cultura latina, raíz cierta de nuestro modo de ser.”
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